VICENÇ BATALLA. Los mundos fantásticos de Tim Burton regresan este otoño (23 de noviembre) con la serie de televisión Miércoles, un spin-off de La familia Adams con la adolescente Wednesday Addams, que supone la primera producción del director estadounidense para una plataforma como Netflix. Burton recibió el pasado mes de octubre el Premio Lumière en el festival de Lyon, que distingue cada año la trayectoria de un o una cineasta. Fue una oportunidad para repasar su rica filmografía desde los años ochenta, que siempre se ha efectuado en los estudios de Hollywood, aunque su relación con ellos, especialmente con Disney donde empezó, todo hace pensar que ha llegado a su fin. Ese espacio para alguien que supo renovar la animación e inyectarle dosis de experimentación gótica parece que ya no existe. Lo mismo ocurre con los superhéroes que han perdido su magnetismo.

En esta conferencia de prensa que dio en la Rue du Premier Film, el director nacido en Burbank, cerca de Hollywood, en 1958, evoca esta evolución conservadora de los estudios y, pese a todo, la emotividad de cada una de sus películas. Habla de su amor por el cine de género, su trabajo junto a Johnny Depp, su terapia con Mars Attacks! y Big Fish, su exilio en el Reino Unido, su identificación con Dumbo, la técnica especial del stop motion y la música de Danny Elfman y Prince. Y, al final, deja en suspense una continuación o no de Beetlejuice. Cuando llegó nuestro turno, este sesentón barbudo que mantiene su espíritu inocente nos respondió, precisamente, sobre si ahora podría darse un nuevo Tim Burton en Hollywood. Y, luego, bromeó sobre el universo Marvel.

Posee, en su haber, alrededor de cuarenta años de carrera. Y ha conseguido imponer su estilo a un gran público. Aunque esta carrera aún no haya terminado, cuando mira hacia atrás, ¿qué piensa?

“La verdad es que no vuelvo a ver mis películas. Fue extraño ver los clips de mis películas anoche en la ceremonia. Tuvo una fuerte carga emocional. Cada una de estas películas forma parte de mi vida, es algo muy profundo y significativo. ¡Es como ver pasar tu vida en flashes ante tus ojos! Por eso, me encantan los funerales, en el buen sentido, porque capturan esos momentos de la vida. Me pareció emocionante y hermoso y, como le dije a Thierry (Frémaux, director del festival), me dio energía. Y, por ello, este festival es tan importante, porque todo gira en torno al cine y no al negocio ni a los premios ni a nada parecido.

¡Vivo o muerto! en las paredes de Lyon

Ayer, había jóvenes muy apasionados en la ceremonia. ¿Cómo se siente al ver que atrae a este público en un momento en el que es difícil que las nuevas generaciones vayan al cine?

“Es increíble. Nunca he experimentado nada como lo de anoche. Es curioso porque a menudo me han dicho que mis películas son muy raras, muy oscuras para los niños. Pero cuando era niño, me gustaban las cosas un poco extrañas y diferentes. Y me hicieron sentir mejor. ¡Es increíble que este tipo de cosas puedan seguir atrayendo a un público mayor y, a la vez, a gente que ni siquiera había nacido cuando hice estas películas! Cuando se consigue esta conexión, es lo más gratificante que pueda ocurrir. ¡Algunas personas incluso me dijeron ayer que a sus perros también les gustan mis películas!”. 

En los años noventa, usted trabajó a menudo con Johnny Depp en películas independientes como Ed Wood. Y ahora él dice que quiere volver a hacer películas independientes. ¿Le gustaría volver a trabajar con él en estas condiciones?

“Hace tiempo que no hago películas, en parte por la pandemia y porque la industria está cambiando con los nuevos hábitos del ‘streaming’. Me siento un poco incómodo con el rumbo que está tomando. Con este festival, nos damos cuenta de que el cine sigue siendo importante. El cine es un formato artístico capaz de trascenderlo todo. Pero yo he trabajado sobre todo con estudios de Hollywood. Nunca he sabido realmente lo que quería decir hacer una película independiente. Johnny hizo películas con los estudios y también películas independientes, y tuvo diferentes tipos de libertad en cada caso. Puedo entender lo que quiso decir… Pero no, no tengo nada planeado por el momento con Johnny. Para hacer una película, lo importante son las ideas al principio, no quién vaya a interpretarlas”.

¿Puede hablar de su nueva aventura con Netflix con la serie Miércoles? Porque nos recuerda a su película Beetlejuice (1988)… ¿Puede contarnos cómo fue el proyecto? También sobre Big Fish (2004), ¿hasta qué punto fue divertido y complejo dirigir esta película en este período de su vida?

“’Big Fish’ era muy importante para mí. Mi padre había muerto recientemente y no tenía una buena relación con él. Eso es algo que se refleja en la película… En cierto modo, es una de las películas más reales y puramente emocionales que he hecho.

En cuanto a ‘Wednesday’, no tenía muchas ganas de hacer una serie sobre ‘La familia Addams’, pero me encanta el personaje de Miércoles (Jenna Ortega en la serie de Burton). Me recuerda un poco a Lydia (la chica de ‘Beetlejuice’, interpretada por Winona Ryder). Es muy pura. Ese soy yo de adolescente, podría haber sido ese personaje. Me gusta su actitud ante la escuela, los padres, la gente, la sociedad… ”.

Es la primera vez que viene a Lyon, ¿qué le parece esta ciudad donde nació el cine?

“Es extraño, porque no había venido aquí antes. Y he estado varias veces en Francia, en París y en otras ciudades. Pero encuentro que en Lyon se respiran vibraciones especiales. Se siente esa energía quizás porque es la cuna del cine, pero también por la gente. Hay algo que hace que quieras crear, algo que atrae. Me gustaría volver a visitar la ciudad sin ver mi cara por todas las paredes. Es como un póster de alguien en búsqueda, ¡vivo o muerto!… Es difícil, cada vez que levanto la cabeza me veo en una gran foto. ¡No me gustan las imágenes de mí mismo!”.

El refugio de las películas de horror y la ciencia ficción

Aparte de todo lo que se ha dicho de usted en los libros, ¿hay algo que no se haya explicado todavía?

“Nunca he sido un gran comunicador de mí mismo. Y no importa lo que haga, películas o dibujos, prefiero que mi trabajo hable por sí mismo. Me gustaría volver a los viejos tiempos, cuando la gente no lo sabía todo sobre las películas. Ahora todo el mundo lo sabe todo sobre todo. Y hemos perdido parte del misterio y la magia de las películas. Me gustaría que algo de ese misterio permaneciera”.

En la clase magistral de ayer había muchos jóvenes. ¿Qué consejo le daría a alguien que quiera empezar en el cine?

“Lo he dicho antes: soy la peor persona a la que preguntar, porque mi trayectoria ha sido bastante atípica. Yo no pensaba en ser director, y he tenido un recorrido extraño. Lo único que puedo decir es que no tienes que preocuparte por lo que hay que hacer: hazlo; ¡utiliza tu propia pasión y cree en el trabajo para que salga de la mejor manera posible! Y a partir de ahí, las cosas llegarán. Si lo haces solo por una razón intelectual, no funcionará. Tiene que ser algo muy importante para la persona que se lanza”.

¿Cómo diseñó sus universos, que son reconocibles entre miles y que se convierten para muchos espectadores en mundos en los que se refugian? ¿Cuáles fueron sus fuentes de inspiración?

“En primer lugar, las películas que veía cuando crecía eran un santuario para mí: películas del género fantástico o de terror. Todo ese tipo de cosas eran mi refugio. Cuando tienes esas experiencias a solas, es algo que te guía, que te da una energía especial. Intenté recrear el tipo de ambiente que me inspiraba de niño. Es la naturaleza de esos sentimientos lo que fue tan importante para mí”.

En relación con Mars Attacks! (1996), ¿cuál fue su fuente de inspiración y utilizó los informes oficiales del ejército estadounidense sobre los ovnis?

“(risas) Fue en un momento extraño de mi vida en el que estaba muy confundido sobre la visión de mi país. Veía muchas contradicciones, sobre lo que era real y lo que no. Y la película fue mi forma de explorar y enfrentarme a eso, buscando lo extravagante y utilizando el género de la ciencia ficción. Todas las películas representan como une terapía para mí, aunque sea una terapía un poco cara… Y alguien dijo que, en ‘Mars Attacks!’, Jack Nicholson interpreta a un presidente de Estados Unidos y, al mismo tiempo, a un sórdido promotor inmobiliario, ¡como una predicción de Donald Trump muchos años antes!”.

La homogeneización de los estudios de Hollywood

¿Qué opina del cine actual ante la crisis que estamos atravesando? ¿Le ha tranquilizado este festival Lumière sobre su futuro en Francia y en el extranjero?

“Hace dos o tres años, y esto ocurría en Hollywood, me decían que todo iba en dirección al ‘streaming’, a Netflix, a la televisión. Y, de repente, llegó la pandemia. Era un poco desesperante esa forma de pensar. Pero, tras la pandemia, la gente sigue respondiendo a las películas, especialmente aquí. Deberíamos obligar a todos los ejecutivos de los estudios a venir aquí, a Lyon, para revitalizarlos. Para recordarles por qué hacen películas, debería ser parte de su trabajo. Estando aquí, me siento muy confiado en el cine. Porque es un arte que conecta con la gente, aunque no ocurra siempre. Por ello, me siento muy confiado y positivo”.

A pesar de su visión optimista, ¿podría alguien que quisiera debutar ahora hacer las películas que usted ha realizado en Hollywood?

“Cuando empecé, tenía un espíritu independiente, pero no era independiente. En los estudios de Hollywood, hacía de todo. Fue extraño, porque me sentí muy afortunado de poder abrirme paso dentro de ese sistema. Las cosas han cambiado mucho. Por ejemplo, en Disney sólo hacen películas de Marvel, Pixar o ‘Star Wars’. Este sistema se ha vuelto demasiado homogéneo y hay menos espacio para hacer cosas diferentes. En los viejos tiempos, siempre había algo que sorprendía al público. Y, a menudo, eso pasa desapercibido para la industria. Y por eso, creo que siempre es posible tener sorpresas. Ahora hay más gente de los negocios y menos gente del cine en los estudios. Es una lucha. Pero creo que siempre es posible sorprenderse”.

¿Cree que podría hacer una película de Marvel? (pregunta del mismo traductor de la rueda de prensa, el periodista Didier Alouch)

“No, sinceramente. Creo que ya hay muchas. ¡No me necesitan! (risas). Yo ya tengo problemas con un solo universo, no me veo gestionando multiuniversos, ¡la verdad!”.

Usted es uno de los dos únicos cineastas, junto con Jon Favreau, que ha adaptado dos veces a los clásicos de Disney con tomas reales. Una vez con un éxito increíble (Alicia en el país de las maravillas, 2010) y, la otra (Dumbo, 2019), con una respuesta menos entusiasta. ¿Comprende esta reacción diferente del público? Por otro lado, si no está haciendo un biopic sobre Robert Smith, debería hacerlo.

“(se ríe del posible ‘biopic’ sobre Robert Smith, el cantante de The Cure) La verdad es que empecé en Disney. Fui contratado y despedido varias veces a lo largo de mi carrera allí. Es por ‘Dumbo’ que creo que he terminado con Disney. Me di cuenta de que yo era Dumbo, de que estaba trabajando en este gran y horrible circo y necesitaba escapar. En cierto modo, esta película es bastante autobiográfica. Por ejemplo, una de mis películas favoritas es ‘Ed Wood’ y fue el mayor fracaso que tuve. Lo mismo con ‘Mars Attacks!’: un fracaso en Estados Unidos, y un éxito en el resto del mundo. Pero no juzgo mis películas por su éxito. Cada trabajo es especial para mí, y puede tener un lado positivo y otro negativo”.

La experiencia Netflix

¿Qué ha encontrado en Netflix que no haya encontrado en sus anteriores experiencias de estudio?

“Es difícil de decir. Creo que, al principio, Netflix sólo daba dinero para hacer películas. Y, ahora, ruedan como si fueran estudios de Hollywood. Y contratan a ejecutivos de otros estudios para hacerlo. Se podría decir que se están convirtiendo en unos estudios en sí mismos”.

Batman vuelve (1992) no fue necesariamente bien recibido cuando se estrenó. Y ahora esto ha cambiado. Hoy en día, con tantas películas de superhéroes, ¿por qué cree que es recibida como una de las mejores películas del género de Hollywood?

“Parece que con algunas de mis películas pasa como con el buen vino: ¡hay que darle tiempo para que envejezca bien! Le ocurrió a ‘Pesadilla antes de Navidad’ (dirigida por Henry Selick a partir de una historia de Tim Burton, 1993). Algunas películas necesitan tiempo para madurar o para ser vistas de otra manera. Hice dos Batman, justo cuando empezaba la era Marvel con esta mentalidad de hacer franquicias. Pero quería evitar una serie de Batman dos, Batman tres, etc. Algunas personas venían y me decían que ‘Batman vuelve’ era más oscuro que el primero, otras que era más brillante, y mi cabeza empezó a estallar”.

¿Volverá al cine de animación y cómo ve el género en la actualidad? 

“Sí, por supuesto que volveré. Sobre todo con el ‘stop motion’ (fotograma a fotograma con figuras reales), que es lo que más me gusta: ‘La novia cadáver’ (2005), ‘Frankenweenie’ (2012) y ‘Vincent’ (1982), mi primer corto. Esta práctica hace chispas en mi corazón. Pero no me gusta pensar en un proyecto decidiendo primero el dispositivo. Es importante que el casting se asegure de que este tipo de animación es la solución adecuada. Pero seguro que volveré a la animación”.

¿Cómo consiguió convencer a Prince para que trabajara en la banda sonora de Batman (1989), ya que era muy complicado de conseguir y extremadamente exigente en sus elecciones y no hacía ninguna otra música para películas, excepto las suyas propias?

“Él quería hacerlo, esa fue la cuestión básica. Fui a su estudio en Minnesota. Fue divertido, porque él no hablaba, y yo no hablaba. Pero le apasionaba este proyecto, eso es lo fundamental. Y así es como ocurrió. Fue divertido porque fue de forma silenciosa (risas)”.

La incógnita sobre la continuación de ‘Bettlejuice’

¿Cuál es su relación con la literatura de terror? ¿Hay escenas de su juventud que le hayan inspirado para películas como Sleepy Hollow (1999)?

“A mí, las películas de terror no me traumatizaron. Tuvieron el efecto contrario, me sentía más identificado. Ese fue el caso con las de Roger Corman, inspiradas en los libros de Edgar Allan Poe. Me sentía cercano a esos personajes, a esas almas torturadas que hablaban con los fantasmas de sus esposas. Nunca me sentí perturbado por esas las películas, fueron catárticas para mí”.

En el caso de la serie Miércoles, ¿de cuántos episodios consta? (pregunta del director del Festival Lumière, Thierry Frémaux, que moderaba la rueda de prensa)

“Hay ocho episodios, cada uno de 45 minutos. Ya he rodado cuatro de ellos y tengo que terminar el resto con otros equipos… Todavía no he terminado, ¡cuando me marche de Lyon tengo que volver a ello!”.

¿Cómo trabaja el sonido de sus películas?

“La música es muy importante para mí, la forma en que Danny Elfman y otros compositores trabajan en mis películas. El sonido es realmente otro personaje. Ayuda a crear una atmósfera muy particular, el mundo con el que vamos a rodar. Y, sobre todo, gracias a la la música que elegimos”.

Cuando hablaba del rodaje de Mars Attacks!, en 1996, dijo que sentía confusión en Estados Unidos. Y, ahora que vive en Londres (se mudó a Inglaterra cuando en 2001 empezó su relación con la actriz Helena Bonham Carter, con quien ha tenido dos hijos), ¿la confusión política en la que se encuentra el Reino Unido también le inspira?

“Sí, o podría inspirarme para irme de nuevo! ¿Podría vivir aquí en Francia?  (risas) Por supuesto, es una locura. Piensas que ya lo has visto todo y, en realidad, cada vez es más surrealista. Es vergonzoso. Pero si me inspirara del ‘brexit’ y sus consecuencias, ¡nadie me creería!”.

La productora estadounidense Plan B ha anunciado la continuación de Beetlejuice. ¿Participará en esta segunda parte o no lo hará?

“No, no excluyo nada. Pero ya lo he dicho antes, y es parte de mi forma de trabajar: sólo puedo saber si estoy involucrado en una película cuando la estoy rodando. Intento volver a las raíces en cada proyecto. Primero hay una semilla y, luego, crece. Es mejor que hacer todas estas declaraciones. De hecho, estoy trabajando en algunas ideas y veremos cómo va. Pero todo es muy prematuro. ¿Tal vez sea una no-respuesta? (más risas)”.

FILMOGRAFÍA TIM BURTON

Vincent (cortometraje de animación; 1982)

Hansel and Gretel (mediometraje; 1982)

Frankenweenie (cortometraje de animación; 1984)

Aladdin and his Wonderful Lamp (mediometraje; 1984)

The Jar (cortometraje para la serie Alfred Hitchcock presenta; 1985)

Pee-wee’s Big Adventure / La gran aventura de Pee-Wee (1985)

Beetlejuice / Bitelchus (1988)

Batman (1989)

Edward Scissorhands / Eduardo Manostijeras (1990)

Batman Returns / Batman vuelve (1992)

The Nightmare Before Christmas / Pesadilla antes de Navidad (animación; a partir de una historia y personajes de Burton con dirección de Henry Selick; 1993)

Conversations with Vincent (documental; 1994)

Ed Wood (1994) 

Mars Attacks! (1996) 

Sleepy Hollow (1999)

Planet of the Apes / El planeta de los simios (2001)

Big Fish (2004)

Charlie and the Chocolate Factory / Charlie y la fábrica de chocolate (2005)

Corpse Bride / La novia cadáver (animación; codirigida con Mike Johnson, 2005)

Sweeney Todd: The Demon Barber of Fleet Street / El barbero diabólico de la calle Fleet Street (2007)

Alice in Wonderland / Alicia en el país de las maravillas (2010) 

Dark Shadows / Sombras tenebrosas (2012)

Frankenweenie (animación; 2012)

Big Eyes (2004) 

Miss Peregrine’s Home for Peculiar Children / El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares (2016) 

Dumbo (2019) 

Wednesday / Miércoles (serie de televisión; 2022)

 

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